viernes, 10 de julio de 2009

Prevención y su deuda con Chile

Pienso que una buena forma de empezar ésta bitacora, es llevando a terreno todas esas ideas plasmadas en mi cabeza y que hoy se sintetizan en algunas oraciones.

Actualmente, llevo 12 años de servicio en la institución voluntaria bomberil de Chile y considero que es justo que explique el hecho que me lleva a escribir sobre algunos puntos en los cuales he concluído y espero sirvan de aporte a quienes participarán de este Blog.

Esta vez, motivado por la incómoda situación en la cual se ve inmersa mi vocación de servicio.

Sucede, que la Institución Bomberil chilena se encuentra bajo importantes recortes presupuestarios a causa de la Crisis Económica Mundial y se hacen insustentables muchos de nuestras acciones que requieren un financiamiento sustentable y oportuno. Me refiero puntualmente a 290.000.000 de pesos, los cuales representan a un 14% de recorte de nuestra asignación anual para los gastos de mantención de los Cuerpos de Bomberos.



Quizás suene normal a estas alturas oír que estamos en una situación económica especial y de Orden mundial, pero también, es preciso saber que están haciendo las autoridades de Bomberos en Chile.

Actualmente, el organismo que representa a los Cuerpo de Bomberos de Chile, es la Junta Nacional
(más info), quienes como autoridad nacional han planteado lo siguiente en base a las acciones de protesta de algunos voluntarios, puntualmente los casos del Cuerpo de Bomberos de la Serena, La Granja y otros que quizás con menos marketing han hecho saber su molestia ante la situación económica:






"A este respecto la Junta Nacional precisa que las mencionadas acciones de protesta no se encuadran con las características y estructura jerárquica y disciplinada de nuestra organización, por lo cual formulamos un llamado a no precipitarse ante estas convocatorias y esperar los resultados de las acciones que estamos realizando en representación de todos los bomberos de Chile ante las autoridades de Gobierno y del Congreso Nacional, pues junto con apartarse de las largas tradiciones del bomberismo nacional, en nada ayudan a la solución del problema."
Fuente: bomberos.cl


Considerando, lo antes expuesto, me pregunto: ¿Seremos los suficientemente enérgicos y organizados para plantear fuentes de financiamiento óptimas para los Cuerpos de Bomberos a través del tiempo?


La respuesta, creo que es obvia y obedece a nuestra “loca geografía”, donde las diferencias de “necesidades”, obedecen extrañamente a las capacidades de financiamiento propio, más que aportes gubernamentales. ¿A qué me refiero?, a medida que pasa el tiempo y las compañías de bomberos adquieren diferentes especialidades para superar un sin número de emergencias, con ello se van encerrando a asumir costos que va requiriendo ese servicio “especial”.


Pongamos esto así: “Hay compañías que nacen por necesidad de la Comunidad y otras que nacen por divisiones de otras, algunas en el pasado nacieron a causa del crecimiento demográfico de las ciudades y que hoy se encuentran a distancias no superiores a los 1.000 metros., algunas oras nacieron como tradición de grupos sociales, etc.”


Entonces la pregunta es: ¿Cuántas compañías de Bomberos son realmente rentables?. Bajo el ojo del dinero, bastante menos que las que existen, pero bajo el ojo de la prevención, ojalá existiera una compañía cada una cuadra.


Por eso, estimados lectores, planteando una hipótesis futurista, o un juego de “proyección” y no tan exagerado al precipitoso quehacer mundial, llegará el día en que quizás el Estado tome acciones dirigidas a rentar a los cuerpos de bomberos en Chile, tal vez, no todos pero, la gran mayoría de aquellos que entienden esto como un trabajo voluntario, tendrán que ampararse en cuerpos de Bomberos distintos a los que pertenecen y que fueron categorizados bajo el sistema de “Cuerpo de Bomberos Rentado”, o quizás lleguemos a tener sólo Comandantes rentados, con turnos rotativos para dar cumplimiento a las 24 hrs. de servicio, o tal vez, tengamos a los Bomberos como una carrera universitaria en paralelo a las carreras de Enfermería o Técnico Paramédico y así el vertiginoso crecimiento de la sociedad irá dando diferentes matices a nuestra labor.


Vuelvo a la idea principal, considero que la tarea de prevención en Chile está en pañales y he allí la tarea para los futuros prevencionistas y bomberos…. LA EDUCACIÓN.


Es cierto que nuestra institución se va adaptando, a mi parecer de manera estática y casi sumisa a las diferentes realidades históricas y situacionales de nuestro país, por eso creo que es necesario que la gente que elegimos tenga la capacidad previsora de poner a los Bomberos en el lugar que se merece.


Nosotros, debemos estar en los colegios, universidades y centros comunitarios asesorando a quienes construyen un país. Somos demasiado cerrados y a causa de ello, mucha gente de nuestro país, casi ni sabe como hacemos nuestro trabajo, las dificultades a las cuales nos enfrentamos, etc. Si queremos que se legisle en virtud del buen servicio, debemos ser más acertados en nuestro grado de compromiso con la sociedad. El día de hoy nos vemos encerrados en nuestros cuarteles ideando formas de mejorar el servicio y dejamos de ver a nuestro alrededor la importancia de informar a nuestros vecinos de lo que hacemos.


“Las puertas de los cuarteles deben ser abiertas”


Hagamos con algún conocido el siguiente ejercicio:


Plantee a cualquier persona, que no sea bombero, la siguiente situación, bajo presión, plantee usted lo siguiente a su encuestado:


“En estos momentos hay un incendio, un accidente automovilístico o otra emergencia que usted elija, ahora por favor, llame a Bomberos…. ¿qué número de emergencias marca?”


Me atrevería a decir que ni el 10% de la gente a la cual le pregunte contestará de manera adecuada con el número de Bomberos 132.



Y allí está la respuesta, hay que pensar en la prevención como una cultura, no como una actividad, debemos estar enseñando a los pequeños que hacer en caso de un incendio, enseñando a los profesores que hacer en caso de una emergencia, debemos estar donde la gente adquiere conocimientos y los lleva a práctica, debemos considerar un término formulado por quien escribe ahora y que creo se acerca a la idea del asunto, debemos formular una “preveacción”, saber y hacer en una misma línea.


Si queremos que se considere a la acción diaria de nuestra vocación, debemos ser nosotros los agentes motivadores del cambio positivo, debemos estar allí, presentes, haciendo saber que hacemos y como lo hacemos y el momento es AHORA.


Los dejo invitados a la reflexión…. Bienvenidos los comentarios.